
Inteligencia artificial: la nueva arma secreta de la oncología
Ahora sabemos que el asbesto (Silicato cálcico magnésico, que constituye una variedad impura del amianto) es un asesino, pero en el siglo pasado se usó ampliamente en la industria, valorado por sus propiedades resistentes al calor y al fuego. Se puede encontrar en la estructura de todo tipo de edificios y centrales eléctricas como aislamiento en barcos e incluso en la fabricación de todo tipo de electrodomésticos. Entonces, mientras los edificios se levantaron, se construyeron barcos y la industria floreció, nadie se dio cuenta de que las fibras microscópicas de asbesto se inhalaban en los pulmones de los trabajadores.